Blogia
Gens

El rostro de la inocencia

El rostro de la inocencia

Desde que abren los ojos y se asoman al mundo, las niñas y niños cubanos exploran con mirada inquieta todo lo que les rodea.

No le esperan grandes riquezas materiales, solo lo imprescindible para una vida digna con derecho a educarse y crecer saludable, con sus derechos en la familia y la sociedad refrendados en las leyes y el entorno cálido de las gentes solidarias.

En la foto Dagne mira inquisitiva y dulcemente. Desde pequeña, cuando aun no tiene dos años, demuestra su preferencia por el baile en graciosos contoneos, y su habilidad para organizar en fila todos los objetos y juguetes a su alcance.

Ya su educación en el círculo infantil y en la familia va sembrando en ella los valores que luego desarrollará a plenitud.

Su alegría y su menuda presencia hacen las delicias de quienes la rodean y saben que crecerá y tendrá el futuro prometedor con el total disfrute de sus derechos.  

0 comentarios