Blogia
Gens

Vivir en Las Tunas

Vivir en Las Tunas Vivir en provincia, en cualquier provincia de cualquier país de este mundo, tiene sus inconvenientes. Prima el conservadurismo en muchos sentidos, el nivel de desarrollo con relación a las grandes capitales en menor y del mismo modo las oportunidades son también inferiores.
Es el llamado fatalismo geográfico. Y no es que en el caso de Cuba, no se hayan hecho esfuerzos por evitar injusticias. Es que el desarrollo es progresivo y acumulativo y cuando alguna provincia de las más atrasadas avanza, las más adelantadas lo han hecho también y con pasos más largos porque disponen de una base económica más sólida.
Muchas personas emigran hacia otras ciudades e incluso al extranjero en busca de realizaciones personales. Pero la mayoría vive y hasta prefiere el ambiente tranquilo y apartado en las pequeñas ciudades, donde también encuentran su encanto.
Las Tunas, capital de la provincia cubana del mismo nombre con 186. 146 habitantes, es una ciudad ubicada en la zona oriental, entre cuyas ventajas siempre estuvo el de ser paso obligado por carretera del oriente al occidente de nuestro estrecho y alargado país. Su ubicación fue incluso estratégica en el siglo XIX cuando en las guerras de independencia marchaban las tropas en uno u otro rumbo.
No conservó riquezas arquitectónicas de la época de la colonia, a causa de que en los años de dura contienda contra el dominio español, fue incendiada en varias ocasiones en fieros combates, y reducida a cenizas.
Pero el espíritu emprendedor y laborioso de sus habitantes logró como el ave fénix levantarla tantas veces como fue destruida, con el resultado actual de una arquitectura ecléctica, de modesta decoración y ornamentación, que se manifiesta fundamentalmente en sus fachadas.
La gente es hospitalaria y defiende el terruño con un sentido de pertenencia, que se acrecienta aun más cuando alguien intenta desmeritar a su prócer independentista, el Mayor General Vicente García, un rico terrateniente que lo perdió todo al entregarse a la Guerra de los Diez Años contra el poder de España y quemó a su ciudad empezando por su amplia casona colonial porque prefirió según sus propias palabras, verla quemada antes que esclava.
Hoy las marcas del desarrollo y también del subdesarrollo son contrastantes.
Cuenta con tres universidades: pedagógica, de especialidades de medicina, y de ciencias técnicas y humanísticas, una amplia red de centros de salud que incluye desde tomografía axial computadorizada hasta cirugías de implantes de lentes intraoculares y tratamientos de medicina natural y tradicional de la culturas orientales como la acupuntura y la homeopatía.
En la cultura sobresale el talento de pintores, músicos, poetas y escritores con una obra reconocida, mientras en los deportes aunque no alcanza los resultados de otras provincias resaltan las individualidades entre los jugadores de béisbol como Osmani Urrutia y Joan Carlos Pedroso, y un joven talento del ajedrez como el Gran Maestro Lázaro Bruzón.
Pero a la par conviven viejas costumbres como el uso del carretón tirado por caballos para la recogida de la basura y otros menesteres, sobre todo en los barrios periféricos, además de los pregoneros por las calles con viandas, frutas, especias y otros productos.
El carácter de las personas tiene la peculiar virtud del optimismo, aun en medio de las tensas situaciones económicas en que se ha visto golpeada la provincia y el país desde inicios de la década del noventa.
Pero ahora la gente de Las Tunas se ve motivada por las perspectivas de mejoramiento del nivel de vida, con aumentos salariales, el anuncio de una mayor venta de productos de consumo y materiales para la construcción y reparación de las viviendas, hasta ahora muy limitados, por el periodo de crisis económica.
Sin embargo existen otras circunstancias como la intensa sequía que por más de una década afecta al territorio de esta provincia, cuyas presas, ríos y pozos han bajado dramáticamente su nivel y afectado la distribución de agua por las redes del acueducto, lo que obliga a extremar el ahorro, mientras que las autoridades gubernamentales y políticas han trazado estrategias como la construcción de conductoras desde río Cauto, el más caudaloso del país, ubicado en la vecina provincia de Granma y desde embalses como la presa Cayojo hasta las plantas potabilizadoras de la ciudad.
Pero hasta tanto llegue el periodo lluvioso, de junio a octubre, y con él la esperanza de que mejore la situación del manto freático, la gente trabaja, los niños juegan y ríen, los jóvenes se divierten y estudian en una ciudad cuyos habitantes tienen la virtud de ser nobles y laboriosos.

1 comentario

Yanet -

Me gusta vivir en Las Tunas, más cuando tengo el placer de conocer personas geniales como Usted!