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Costumbrismo

Paisaje después del desfile

Paisaje después del desfile

Como cada año el primero de mayo se convierte en un día de festejos que muchos tuneros lo toman muy en serio  y permanecen después del desfile compartiendo entre amigos, familiares y compañeros de trabajo  durante toda la jornada en las áreas de la plaza.

En esta ocasión, la fiesta contó con la actuación de Pachito Alonso y sus Kini Kini, con sus hijos Cristian y Rey, la tercera generación de estos artistas herederos de Pacho.

Largas hileras de kioscos  con fiambres y comida  y los termos de cerveza y refrescos en el fondo y alrededores de la plaza completan la fiesta popular.

Para quienes como a mi  nos parece demasiado el calor y el sol allí reinantes, queda la opción de llegarse a disfrutar un buen jugo de frutas.

De todas formas en público o en familia los tuneros  disfrutan  de buen ánimo este feriado cuando ya el verano aprieta y la carencia de lluvia se aprecia en el escaso verdor de los  árboles.

Que vuelva el calor de siempre

Casi nadie-para no ser absoluta- está conforme con lo que tiene.

Siempre recuerdo aquel verso de la canción Lucia,de Juan Manuel Serrat: “No hay nada más bello que lo que nunca he tenido, nada más amado que lo que perdí”.

  Así es de contradictorio es el ser humano. Nosotros mismos los que vivimos en estas tierras cálidas del oriente cubano, cuando el Sol y el calor aprietan y sudamos con 35 grados Celsius añoramos que refresque un poco la temperatura. ¡Pero no tanto!

Luego de unos meses de enero y febrero bastante frescos para nuestro gusto, ya estamos deseando que se vaya el invierno.

El frio con cielo despejado es más frío, pero cuando está nublado resulta deprimente.Tanto motiva el tema que en los días de enero que más bajó la temperatura, hubo gente que como buenos cubanos conocen de todo y se consideran bien actualizados, especulaban que debido a los cambios climáticos aquí llegaría a nevar.Los expertos tuvieron que aclarar el asunto, porque ese charco caliente que es el  Golfo de México difícilmente lo permitirá.

Cuando marzo enrumba hacia la mitad del mes, incluso está pronto a restaurarse el horario de verano, todavía hay que andar arropados para evitar un resfriado.Pero ya con la vista puesta en el próximo verano, veremos entonces cuando el clima ardiente nos queme la piel, si no añoraremos un poco del fresco que ahora sentimos.

 

LA ASTUCIA DEL COCODRILO 

 Una de las incógnitas que motivó a Manuel Alonso Tabet en su condición de biólogo, dedicar buena parte de su vida al estudio del cocodrilo acutus en el Monte Cabaniguán y particularmente de su conducta, fue buscar una respuesta a cómo era posible que esta especie hubiera sobrevivido a la sistemática depredación a que la sometió el hombre a través de los siglos.

Este reptil milenario, habitaba en estas tierras a la llegada de Colón,en la zona del delta del Río Cauto, entre lo que hoy conforman las orientales provincias cubanas de Las Tunas y Granma.

Manuel ha obtenido testimonios de personas que recuerdan que entre los años 30 y 40, llegaban hombres que los mataban para vender sus pieles y hacían de esto un medio de vida.

La presión en esos años fue tal que estuvo al borde de desaparecer porque perseguían a las reproductoras de mayor talla.

En otros períodos hubo conductas atroces de personas que los cazaban a tiros por el puro placer de la aventura o para comer sus carnes.Aplicar medidas de protección y poco a poco ir cambiando la percepción sobre la importancia de esta especie fue algo que llevó tiempo para volver a restablecer la población.

En el año 1987 esta zona pasó de la Empresa Forestal  a la  Empresa Nacional para la Conservación de la Flora y la Fauna.No ha sido tarea de un día.

Lograr hoy una población estable del cocodrilo acutus o cocodrilo americano ha requerido de la fuerza y el corazón de hombres interesados en la defensa de nuestras riquezas naturales.

Con la ayuda de estos hombres he vuelto a la zona poco más de diez años después de mi primera visita.

Es un sitio distante 60 kilómetros de la capital provincial de Las Tunas.

El trayecto difícil por camino plagado de fango, en un año 2006 en que se registran hasta el 13 de septiembre 862 milímetros de lluvia en la estación biológica Don Miguel Álvarez del Toro del Monte Cabaniguan y con cifras incluso superiores en lugares aledaños, lo que dificulta aun más el acceso a la zona, pero con elevados beneficios para un ecosistema que constituye el mayor refugio de fauna del continente del cocodrilo acutus o cocodrilo americano.

Cuando Miguel Alonso Tabet comenzó a encontrar algunas respuestas a las incógnitas iniciales, pensó en que lugar de acutus bien le vendría el nombre de cocodrilo astutus, por su habilidad para adaptarse a los cambios y a las agresiones del hombre. 

          LAS TUNAS FESTEJA SU FUNDACION 

Este 30 de septiembre de 2006, la ciudad de Las Tunas festeja los 210 de su fundación, más que basada en un hecho histórico, se toma como motivo esencial una festividad religiosa: el día de San Jerónimo, su Santo Patrono.

Según los cronistas, en l796 se habían nucleado en torno a la parroquia de San Jerónimo moradores de haciendas, hatos y corrales circundantes, quienes inicialmente construyeron rústicas edificaciones para las celebraciones eclesiásticas, y poco a poco se quedaron a vivir en las inmediaciones hasta que se fundó el poblado.  

Pero la historia de los que habitaban estas tierras se remonta  muchos más allá de finales del siglo 18, incluso antes de que fuera tan solo un “corral de cactus melancólicos” como la llamó el poeta Carlos Tamayo Rodriguez.  

Sus habitantes originarios constituyeron cuatro siglos atrás el cacicazgo de Cueibá. 

En épocas pretéritas eran tierras de extensos pastizales, donde pastaba el ganado en sus terrenos de llanura. Entonces como ahora, eran frecuentes a la vista las plantas de la tuna, el cactus que al final dio nombre a la ciudad. 

Cuentan que a mediados del siglo XVII llegó a esta zona atraído por la belleza de sus paisajes, Diego Clemente Rivera, quien se dedicó a fomentar la crianza de ganado, y con ello fue atrayendo a otros ganaderos que se asentaron en una zona que siempre ha sido tránsito entre el oriente y el occidente, dada las características geográficas de nuestra isla estrecha y alargada. 

Hasta que con la división político- administrativa de l976 se reconoció su importancia urbana, como capital de la provincia del mismo nombre, se llamó a través del tiempo, indistintamente San Gregorio de Las Tunas, Corrales de Las Tunas, Las Tunas de Bayamo, y Victoria de Las Tunas. 

Hoy es una ciudad considerada de primer orden por contar con unos 130 mil habitantes, y su crecimiento rebasa con mucho los estrechos límites entre ferrocarril y el cementerio de hace más de cuatro décadas y que los nostálgicos recuerdan. 

A la par con sus habitantes, Las Tunas creció en escuelas, hospitales, centros culturales, y deportivos, servicios gastronómicos, industrias, infraestructuras viales y otras mejoras que aunque no satisfacen en su totalidad las expectativas de sus habitantes cuando la comparan con otras capitales provinciales, constituyen un avance significativo e indiscutible en lo económico, social y cultural. 

Por eso los tuneros, que festejan con júbilo la fecha marcada como de la fundación de la ciudad y de San Jerónimo, su Santo Patrono, sienten el orgullo de residir en un lugar, donde a los logros materiales se une la riqueza perdurable que se atesora en las virtudes de su gente solidaria, afable y trabajadora.         

La vida

La vida es una oportunidad, aprovéchala
La vida es belleza, admírala
La vida es beatitud, saboréala
La vida es un sueño, hazlo realidad
La vida es un reto, afróntalo
La vida es un deber, cúmplelo
La vida es un juego, juégalo
La vida es preciosa, cuídala
La vida es riqueza, consérvala
La vida es amor, gózala
La vida es un misterio, devélalo
La vida es promesa, cúmplela
La vida es tristeza, supérala
La vida es un himno, cántalo
La vida es un combate, acéptalo
La vida es una tragedia, domínala
La vida es aventura, arróstrala
La vida es felicidad, merécela
La vida es la vida, defiéndela

Madre Teresa de Calcuta